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miércoles, 4 de mayo de 2022
lunes, 27 de abril de 2020
viernes, 24 de abril de 2020
jueves, 19 de marzo de 2020
lunes, 18 de noviembre de 2019
lunes, 14 de octubre de 2019
jueves, 22 de agosto de 2019
martes, 18 de junio de 2019
jueves, 13 de junio de 2019
Algo más de historia del Perú
¿Qué hacían los incas para evitar las enfermedades y cómo las trataban?
Recientes estudios muestran que las prácticas médicas durante el incanato tenían, en algunos casos, bastante éxito

Los
incas tuvieron un gran éxito en las trepanaciones craneanas. Izquierda:
trepanación de persona fallecida tras la intervención. Derecha:
trepanación exitosa. Se nota la regeneración del tejido óseo. (Foto:
Archivo)
El Inca está enfermo. El médico de la nobleza (amauca) no sabe la causa, pero está convencido de que no es culpa del soberano.
Esta es una escena ficticia que pudo ocurrir hace más de 500 años,
cuando el imperio incaico dominaba gran parte de Sudamérica. En aquel
tiempo, el origen de las enfermedades era todo un enigma y las personas dedicadas a la práctica médica solían atacar solo los síntomas.
El tratamiento de los males estaba organizado en todo el imperio y se contaba con una serie de procedimientos y rituales heredados de anteriores culturas.
Pero, en particular, “la enfermedad del inca era un suceso de la mayor
importancia y trascendencia, sentida e integrada por el pueblo como algo
propio”, como señalan los doctores Ramón Madrigal Lomba y María del
Carmen López Quintana, en su obra ‘La medicina en el Perú Prehispánico’.
exitosa. Se nota la regeneración del tejido óseo. (Foto: Archivo)
El Inca está enfermo. El médico de la nobleza (amauca) no sabe la causa, pero está convencido de que no es culpa del soberano.
Esta es una escena ficticia que pudo ocurrir hace más de 500 años,
cuando el imperio incaico dominaba gran parte de Sudamérica. En aquel
tiempo, el origen de las enfermedades era todo un enigma y las personas dedicadas a la práctica médica solían atacar solo los síntomas.
El tratamiento de los males estaba organizado en todo el imperio y se contaba con una serie de procedimientos y rituales heredados de anteriores culturas.
Pero, en particular, “la enfermedad del inca era un suceso de la mayor
importancia y trascendencia, sentida e integrada por el pueblo como algo
propio”, como señalan los doctores Ramón Madrigal Lomba y María del
Carmen López Quintana, en su obra ‘La medicina en el Perú Prehispánico’.
“Cuando enfermaba el Inca, su causa se atribuía a muy graves faltas cometidas por sus súbditos,
ya que el Capac Inca, considerado hijo del Sol, no podía cometer
pecado, ni infringir precepto alguno, y en su enfermedad también
enfermaba el Sol, se debilitaba, y como fuente suprema de vida,
acarreaba entonces múltiples peligros a la comunidad”, explica, por su
parte, Miguel Dietschy, en su libro 'La medicina en el Perú de antaño:
El rey-dios y las enfermedades'.
Para evitar que los males lleguen al Inca y al resto del pueblo, se realizaban grandes ceremonias de purificación durante el año. La más importe de ellas era la festividad “Situa”, que se realizaba durante el equinoccio de primavera.

Los incas realizaban ceremonias y festividades para tratar de alejar las enfermedades. (Foto: Difusión)
Durante el
acto de purificación, el soberano acudía al Templo del Sol durante el
cuarto creciente de la Luna. Luego de la ceremonia, salía y era recibido
por una multitud de personas y guerreros, quienes “iniciaban una carrera espectacular lanzando alaridos en todas las direcciones, esgrimiendo sus armas y hondas con proyectiles ardiendo, toda una ceremonia masiva con el fundamento mágico de ahuyentar las enfermedades”, relata Dietschy.
El espectacular acontecimiento culminaba cuando los guerreros se bañaban y lavaban sus armas en el río junto al pueblo,
quienes también se “embadurnaba el rostro, el umbral de las puertas,
los nichos de alimentos, las momias y los pozos con una papilla espesa
de maíz”.
¿Cómo trataban los incas las enfermedades?
Los
investigadores de la medicina prehispánica analizaron la cerámica del
antiguo Perú (principalmente huacos antropomorfos) para determinar cuáles eran las enfermedades más comunes en la población. Entre los males hallados, se encuentran la acromegalia, la enfermedad de Basedow, la enfermedad de Carrión (verruga peruana), ceguera, parálisis, deformidades, lepra, uta, sífilis, leishmaniasis, blastomicosis, lupus, hemorragias, entre otras.
Las personas que presentaban estas afecciones, acudían a los médicos, quienes tenían conocimientos sobre anatomía, plantas medicinas y eran considerados enlaces con las deidades. Se creía que los males se debían a malas acciones.
“Los médicos se llamaban ichuri,
y eran adivinos. Los curanderos y los brujos se llamaban comascas y los
médicos pertenecientes a la nobleza se llamaban amaucas. El enfermo confiaba las culpas cometidas al ichuri que era médico y
confesor quien una vez enterado de ellas indicaba las ofrendas y las
ceremonias que debían efectuarse. El rito se acompañaba de alaridos, de
gritos y ‘exorcismos’ para espantar el mal. Se practicaban frotaciones y
sobamientos en la parte enferma o en todo el cuerpo, y se terminaba con
la succión de la parte adolorida”, relata José de Cornide en el libro
'La Medicina en Iberoamérica'.

Los
médicos se llamaban ichuri, y eran adivinos. Los curanderos y los
brujos se llamaban comascas y los médicos pertenecientes a la nobleza se
llamaban amaucas. (Ilustración: MHN)
Los médicos usaban, señala Dietschy, coca para el dolor, el estigma del maíz como diurético, la quina en las fiebres intermitentes y bálsamos de resinas de leguminosas (miroxylon peruiferum) para curar heridas.
El uso terapéutico de estas plantas fue heredado por los incas,
cuyo conocimiento de hierbas medicinales era alabado en la conquista,
tanto “que los consideraron los primeros conocedores de la Naturaleza en
todo el mundo”.
Las exitosas trepanaciones craneanas
Las trepanaciones craneanas, un antecedente de las actuales craneotomías,
cirugías de alta complejidad en las que se perfora el cráneo debido a
infecciones o contusiones, se practicaban en el antiguo Perú, teniendo a
los médicos incas como aquellos que tuvieron mayor éxito: más del 80% de los pacientes lograba sobrevivir a la intervención, de acuerdo a un estudio publicado en la revista Science en 2018.

Las trepanaciones craneanas pueden ser rastreadas hasta la cultura Paracas. (Foto: MHN)
En esta práctica -que tiene unos 7 mil años de antigüedad y se realizó también en partes de América, Asia, África y Europa-, los médicos incas tuvieron un mayor éxito que sus pares en EE.UU., que aplicaron el procedimiento durante Guerra Civil Americana (1861–1865), unos 400 años después.
Estos
resultados replicaban los hallazgos de Valerie Andrushko, de la
Universidad del Conecticut, y John Verano, de la Universidad de Tulane,
quienes en un estudio publicado en American Journal of Physical
Anthropology analizaron 411 cráneos del período inca.
"Lejos de la idea de que unos salvajes agujereaban cráneos para alejar a los demonios, lo cierto es que eran cirujanos muy especializados”, señaló Andrushko a El Mundo.

Uno
de los cráneos analizados en 2008 muestra varios agujeros de
trepanaciones. (Foto: American Journal of Physical Anthropology)
Las trepanaciones eran realizadas sin anestesia ni antibióticos y eran aplicadas a las personas que presentaban golpes en la cabeza, para aliviar la presión sobre el cerebro, heridas de guerra, epilepsia o migraña.
“Para operar, se 'anestesiaba' al paciente con coca o alcohol, luego se procedía a cortar el cuero cabelludo hasta llegar al cráneo y se delimitaba el área a cortar marcando el perímetro. Se han descrito que para cortar el cráneo utilizaron la obsidiana (piedra volcánica), curetas de dientes de cachalote, el Tumi, entre otros instrumentos. Se extraía el área afectada,
teniendo mucho cuidado, se limpiaba y tapaba la zona con una placa de
oro y por último se colocaban los vendajes con finos algodones propios
de la zona”, explica los autores de ‘Historia del Tumi: Símbolo de la
Medicina Peruana y del Colegio Médico del Perú’.
La trepanación craneana puede rastrearse a la cultura Paracas
y, en el transcurso de 1.000 años, fue perfeccionada hasta lograr un
alto nivel de efectividad, menor mortalidad, al lograr orificios más
pequeños y menos cortes o perforaciones.
Algo más de
miércoles, 10 de abril de 2019
viernes, 8 de marzo de 2019
El Tardígrado
La extraña criatura capaz de "detener el tiempo" que podría ayudarnos a sobrevivir
Estas especies son capaces de reducir su metabolismo al mínimo y reactivarse para ser rehidratados. Científicos investigan cómo aplicar ello en medicina para conservar tejidos

Los
investigadores consideran que el tardígrado sería la especie sobre
nuestro planeta con más oportunidades de sobrevivir a cualquier tipo de
calamidad astrofísica. (Foto: AP)
En medicina existen casos en los que sería muy útil detener o retrasar el tiempo porque permitiría evitar una amputación, prevenir un derrame cerebral tras una parálisis, incluso salvar una vida después de una taquicardia.
Existen organismos capaces de desacelerar su metabolismo, como si de detener el tiempo se tratase, uno de ellos es el tardígrado,
una criatura del tamaño de un grano de arena que puede sobrevivir a
presiones y temperaturas rigurosas, como al espacio exterior gracias a
su estado de animación suspendida, llamada anhidrobiosis.
Este sistema biológico ha sorprendido a un grupo de científicos de la Facultad de Medicina de la Universidad de Harvard,
que viene estudiando a estas criaturas con el fin de encontrar
tratamientos médicos que detengan el daño a los tejidos para hacer una
pausa en la muerte celular. Para ello, analizan a los tardígrados.

El tardígrado conocido como “oso de agua” tiene ocho patas y bajo un microscopio parece un croissant. (Foto: AFP)
“Cuando
alguien resulta herido, hay una ventana de tiempo para ir con un médico o
a un hospital”, indicó Pamela Silver, profesora de biología de
sistemas. “Así que nuestra meta general es: ¿cómo prolongar ese
tiempo?”, señaló.
El tardígrado conocido como “oso de agua” tiene ocho patas y bajo un microscopio parece un croissant.
Ellos viven en cualquier lugar donde exista agua, desde entornos
cotidianos hasta los ambientes más extremos de la tierra como aguas
terminales, profundidades del hielo antártico, fosas oceánicas hasta en
los picos del Himalaya.
Cuando
realizan la anhidrobiosis, estos seres invertebrados se enroscan en una
bolita disecada y reducen su metabolismo al 0.01% de lo normal. Así
pueden permanecer durante muchos años y reanudar su actividad al ser
rehidratados.
Hace dos
años, varios investigadores descubrieron proteínas singulares, las
cuales podrían ayudar a proteger las células. Sin embargo, no está claro
cómo funcionan.
Por el
momento, el equipo de científicos viene recibiendo fondos del Ejército
de Estados Unidos para encontrar terapias con estas proteínas que sirvan
para detener hemorragias y la muerte de tejidos en lesiones. miércoles, 6 de marzo de 2019
martes, 16 de octubre de 2018
jueves, 23 de agosto de 2018
jueves, 16 de agosto de 2018
El Alzheimer
Alzheimer hereditario y gestión neuronal del hierro estarían vinculados
Los autores del estudio consideraron que, si bien puede haber una conexión entre el hierro y el Alzheimer, se necesitan investigar más los efectos

Los
investigadores advirtieron de que la nueva teoría no está vinculada a
la cantidad de hierro en las dietas de las personas, sino a la gestión
del organismo. (Foto: AFP)
La degeneración observada en la enfermedad del Alzheimer hereditario,
causada por una rara mutación genética, podría producirse por problemas
en el manejo neuronal del hierro, sostiene un estudio publicado en la
revista "Frontiers in Neuroscience".
"El
hierro es esencial para los pequeños centros neurálgicos de nuestras
células, las mitocondrias, que generan la mayor parte de la energía que
necesitan las células para funcionar", dijo Michael Lardelli, de la
Universidad de Adelaida, uno de los autores del estudio.
Los
investigadores advirtieron de que la nueva teoría, que podría ayudar a
prevenir esta enfermedad degenerativa del cerebro, no está vinculada a
la cantidad de hierro en las dietas de las personas, sino a cómo las
células lo gestionan, matiza un comunicado de la australiana Universidad
de Adelaida.
Los autores
del estudio consideraron que, si bien puede haber una conexión entre el
hierro y el Alzheimer, se necesita investigar más la forma en que las
mutaciones que causan la enfermedad afecta al hierro celular.
"Los genes
mutados en el Alzheimer hereditario parecen afectar a cómo el hierro
entra en las neuronas y cómo se recicla dentro de ellas", agregó
Lardelli.
El científico
enfatizó que una alteración en la manera de cómo gestionan el hierro las
neuronas, que necesitan una gran cantidad de energía, podría tener
consecuencias muy graves a largo plazo.
"Además, el
hierro tiene un papel clave en las inflamaciones y en la producción de
moléculas dañinas en la molécula llamada 'especies reactivas de oxígeno'
y ambas ocurren a niveles elevados en los cerebros con la enfermedad de
Alzheimer", precisó.
La mayoría de
los científicos cree desde hace más de 20 años que el péptido beta
amiloide causa la enfermedad de Alzheimer y su remoción del cerebro
puede desacelerar la tasa del declive cognitivo, pero hasta ahora no se
ha podido detener el avance de la enfermedad.
(Fuente: EFE)
miércoles, 8 de agosto de 2018
viernes, 27 de julio de 2018
martes, 26 de junio de 2018
La computadora más pequeña del mundo
La computadora más pequeña del mundo al lado de un grano de arroz [FOTO]
Este aparato que mide apenas 0,3 mm fue creado por la Universidad de Michigan. ¿En qué será empleado?

El sensor creado en la Universidad de Michigan tiene 0,3 mm de lado; aquí, junto a un grano de arroz como comparación.
La
imagen que acompaña este texto no deja muchas dudas: un cuadradito con
unos alambres junto a un objeto oblongo, blanco, levemente traslúcido. El cuadradito es la computadora más pequeña del mundo; el bloque blanco a su lado, un grano de arroz.
La intención,
claro, es dar una referencia para mostrar, con un objeto conocido, lo
diminuto del dispositivo; y a la vez, usarlo para mostrar cuánto más
chica es esta computadora que la que anunció IBM en marzo, que usó un
grano de sal como referencia. Es diez veces menor, según sus creadores.

Computadora de IBM junto a granos de sal. (Imagen: IBM Research)
Pero son computadoras bastante diferentes, porque con la miniaturización los científicos de la Universidad de Michigan tuvieron que limitar bastante la capacidad de este equipo.
Por ejemplo, no puede tener antena de radio para enviar y recibir información, así que usa un LED especial, cambiando los diodos por capacitores conmutados. La luz que le envía una estación base le transmite los datos, y también energía; y lee los pulsos de luz con los que esta diminuta computado se comunica con ella. Al igual que la de IBM, no tiene memoria permanente: si se apaga, pierde todos los datos recabados.
Este sensor es, sobre todo, un termómetro, capaz de detectar variaciones de 0,1 grados Celsius. Es biocompatible y está pensado para analizar, entre otras cosas, la temperatura de un grupo de células cancerígenas (en un tumor, por ejemplo); en medicina hace tiempo se intenta comprobar que las células cancerígenas tienen una temperatura levemente mayor al del tejido sano, pero es difícil medir esto con precisión, y este sensor permitiría lograrlo al ser implantado en forma permanente en cualquier parte sin que el paciente (humano o animal) lo sienta.
(Fuente: La Nación de Argentina - GDA)
Por ejemplo, no puede tener antena de radio para enviar y recibir información, así que usa un LED especial, cambiando los diodos por capacitores conmutados. La luz que le envía una estación base le transmite los datos, y también energía; y lee los pulsos de luz con los que esta diminuta computado se comunica con ella. Al igual que la de IBM, no tiene memoria permanente: si se apaga, pierde todos los datos recabados.
Este sensor es, sobre todo, un termómetro, capaz de detectar variaciones de 0,1 grados Celsius. Es biocompatible y está pensado para analizar, entre otras cosas, la temperatura de un grupo de células cancerígenas (en un tumor, por ejemplo); en medicina hace tiempo se intenta comprobar que las células cancerígenas tienen una temperatura levemente mayor al del tejido sano, pero es difícil medir esto con precisión, y este sensor permitiría lograrlo al ser implantado en forma permanente en cualquier parte sin que el paciente (humano o animal) lo sienta.
(Fuente: La Nación de Argentina - GDA)
viernes, 15 de junio de 2018
martes, 3 de abril de 2018
Lo que pasa en tu cerebro cuando ...
¿Qué ocurre en tu cerebro cuando tienes al frente a un cachorro?
Lo usual es que uno tenga ganas de abrazarlo y cargarlo. Esto se debe a la descarga de ciertos neuroquímicos
Cachorro (Foto: AP) Redacción EC 03.04.2018 / 07:21 am
¿Puedes resistir la mirada de un cachorro? Lo usual es que tengas ganas incontrolables de cargarlo y abrazarlo, incluso uno suele hablarle con una voz aguda y caricaturesca, como si se tratara de un bebe. ¿Por qué ocurre esto? ¿Qué pasa en tu cerebro que te hace comportar de dicha manera? En cierto nivel, uno reacciona como si se tratase de un bebe humano, lo que genera una respuesta instintiva de protección y empatía. Y es que ambos comparten ciertos rasgos, como ojos grandes y pequeñas nariz y boca. A este tipo de apego se le conoce como 'baby schema', y fue planteado por Konrad Lorenz, ganador del Premio Nobel de Medicina o Fisiología en 1973. Pero eso no es todo. Un estudio realizado por expertos de la Universidad de Azabu (Japón) encontró que cuando uno mira a los ojos a un cachorro se libera una sustancia conocida como oxitocina, que es clave para reforzar el vínculo afectivo entre madre e hijo cuando se miran durante la lactancia.
La oxitocina también está asociada al sentimiento de pertenencia a un grupo social, las relaciones de pareja y la conducta sexual. En sí, es una sustancia que conecta a los individuos. Hay que entender que para el cerebro un cachorro es un como un hijo recién nacido. Esta idea está respaldada por un experimento publicado en la revista PLOS One, en el cual se le mostró a madres fotos de sus bebes y de sus perros. En ambos casos se activaron regiones cerebrales asociadas con emoción, recompensa, afiliación, e interacción social. Como mencionamos al principio del texto, uno suele usar en ciertas ocasiones una voz en tono alto y emoción exagerada para comunicarse con su perro. Puede parecer un comportamiento sin sentido, pero funciona. Un estudio publicado en la "Royal Society" concluye que esta forma de hablar afianza los lazos entre la persona y el cachorro, y hace que este preste mayor atención. También se ha demostrado que pasar tiempo con perros libera en el cerebro dopamina y endorfina, neuroquímicos responsables de sensaciones de bienestar y placer.
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