Terroristas disfrazados de mujeres atacaron el Parlamento de Irán
El grupo Estado
Islámico también atacó el mausoleo del ayatolá Ruhola Jomeini en
Teherán. Hay 13 muertos por los ataques simultáneos
(Video: AFP)
El guía supremo iraní Ali Khamenei minimizó el impacto de los primeros atentados del Estado Islámico en Teherán (capital de Irán)
que dejaron 13 muertos este miércoles, al tiempo que el presidente
norteamericano Donald Trump afirmó que "quienes respaldan el terrorismo
se exponen a ser sus víctimas".
Hombres
armados y kamikazes atacaron este miércoles el Parlamento y el mausoleo
del ayatolá Jomeini, provocando al menos trece muertos y 46 heridos.
Por
la noche, en una primera reacción oficial, el presidente iraní, Hasan
Rohani, instó a la "unidad y a la cooperación regional e internacional"
contra el terrorismo, en un comunicado publicado en la página web de la
presidencia.
Según el dirigente, "los que quieren el mal para el
Irán islámico (...) reclutaron elementos reaccionarios y takfiris [como
se llama en Irán a los grupos yihadistas], para intentar esconder sus
fracasos regionales y hacer olvidar el descontento dentro de su propia
sociedad".
Rohani no citó directamente a Arabia Saudita y Estados
Unidos, como sí lo hicieron los Guardianes de la Revolución, el
ejército de élite iraní, que denunció la "implicación" de estos dos
países en los atentados.
Por su parte, el guía supremo iraní, Ali
Jamenei, aseguró que estos ataques "no tendrán ningún efecto en la
determinación del pueblo iraní", durante una recepción de estudiantes en
Teherán, según su página oficial.
Desde Washington, Trump dijo
en un breve comunicado que reza por las "víctimas inocentes" de los
ataques, pero comentó que "los Estados que apoyan al terrorismo se
arriesgan a convertirse en víctimas del mal que promueven".
Perpetrados
casi simultáneamente, los ataques lanzados por la mañana contra dos
lugares altamente simbólicos dejaron 13 muertos, según un último balance
de la agencia Isna, y al menos 46 heridos.
Duraron varias horas,
pero "las fuerzas del orden controlan [ahora] la situación", según el
ministerio del Interior, que afirmó que los seis asaltantes habían
muerto.
El primer grupo, que atacó el mausoleo, "estaba compuesto
por dos personas: la primera, se hizo explotar en los jardines del
mausoleo y la segunda fue abatida por las fuerzas del orden", agregó.
Por
otro lado, cuatro asaltantes atacaron el Parlamento, según el
ministerio. Dos se inmolaron y otros dos fueron abatidos por las fuerzas
de seguridad.
Los atacantes del Parlamento tenían entre "20 y
25 años", declaró a la agencia Fars Mohamad Hosein Nejat, jefe adjunto
de los servicios de inteligencia de los Guardianes de la Revolución.
—Venganza— El
responsable acusó a Arabia Saudita, rival regional de Irán, y a Estados
Unidos, que no mantienen relaciones diplomáticas con Teherán, de haber
"ordenado a sus marionetas" que lleven a cabo estos atentados.
En
un comunicado, los Guardianes de la Revolución señalaron que los
atentados tuvieron lugar tras el encuentro del presidente
estadounidense, Donald Trump, con "el jefe de uno de los gobiernos
reaccionarios de la región, que siempre ha apoyado a los terroristas",
en alusión a Arabia Saudita.
"La reivindicación de Dáesh
[acrónimo árabe de Estado Islámico] demuestra que están implicados",
agregaron, prometiendo no dejar "nunca sin venganza la sangre de
inocentes derramada".
Los atacantes que irrumpieron en el
Parlamento iban disfrazados de mujeres, según el viceministro del
Interior, Hossein Zolfagari.
Es la primera vez que el EI, un
grupo extremista sunita, reivindica atentados en Irán. "Combatientes del
EI atacaron el mausoleo de Jomeini y la sede del parlamento en
Teherán", señaló la agencia Amaq, el órgano de propaganda del grupo
yihadista, mencionando dos atentados suicidas.
Según el
ministerio de los servicios secretos, otro grupo de "terroristas" fue
neutralizado en Teherán antes de pasar a la acción.
El ministro
de Relaciones Exteriores iraní, Mohamad Javad Zarif, afirmó que los
atentados "reforzarán la determinación de los iraníes de luchar contra
el terrorismo".
Tras los atentados, Rusia, aliado de Irán en Oriente Medio, condenó los ataques e instó a "coordinar la lucha antiterrorista".
"Estos
actos de terrorismo merecen la más dura condena. Estos ataques ponen de
relieve la necesidad de coordinar la lucha antiterrorista, sobre todo
contra el Estado Islámico", declaró a la prensa el portavoz del Kremlin,
Dimitri Peskov.
Irán, junto a Rusia, apoya al régimen sirio en su lucha contra los grupos rebeldes y los yihadistas.
Damasco y Bagdad denunciaron estos ataques, así como Estados Unidos, Francia y Alemania.
—Células desmanteladas— Los
últimos ataques en Teherán se remontan a los años 2000, perpetrados la
mayoría de ellos por la organización armada de los Muyahidines del
Pueblo.
Las fuerzas de seguridad iraníes han afirmado que en
estos dos últimos años han desmantelado varias células del EI en Irán
que preparaban atentados.
El EI publicó en marzo un video en
persa donde afirmaba que el grupo iba a "conquistar Irán y a devolverlo a
la nación musulmana sunita", matando a los chiitas.
Aunque
regiones cercanas a las fronteras con Irak, Afganistán y Pakistán han
sido atacadas por los grupos yihadistas, entre ellos el EI, los grandes
centros urbanos se habían mantenido al margen de estos atentados hasta
ahora.